Y matar fue lo que hizo

Y matar fue lo que hizo

Francisco Javier Chaín Revuelta

Hace 100 años los trabajadores también pidieron la mediación del gobierno. Pero el trabajo de los gobernantes es proteger a los propietarios, cuidar a sus patrones capitalistas que son quienes los ponen “legalmente” en el poder. Por tanto, hoy como ayer, el gobierno de Porfirio Díaz sólo intervino a favor de los empresarios en todos los puntos. Ante la infamia, el Gran Círculo de Obreros Libres (GCOL) dispuso terminar la huelga el 4 de enero de 1907 en todas las fábricas, no así la de Río Blanco.

La infame postura gubernamental causó una reacción inmediata contra el gobierno. Los manifestantes gritaban lemas como " ¡Muerte a Díaz!" y " ¡Abajo con la dictadura!" El 7 de enero, un grupo de disidentes se reunió con trabajadores que llegaban para el trabajo afuera de la fábrica. Según la muchedumbre se agrandaba, atacaron y quemaron el almacén de la compañía. Desde allí, se trasladaron a Orizaba y de la cárcel liberaron a todos los presos cantando: "¡Muerte a Porfirio Díaz!".

Las noticias de estos acontecimientos se extendieron rápidamente y más adelante en el mismo día, se unieron con trabajadores de las ciudades próximas de Santa Rosa (Ciudad Mendoza) y Nogales. Estas fuerzas combinadas entonces participaron en escaramuzas armadas contra el ejército durante los dos días siguientes. Katz señala que el ministro alemán en México informaba que cuando los propietarios de la fábrica le pidieron aplastar la huelga por la fuerza, Díaz contestó "¡Gracias a Dios, yo puedo todavía matar¡" Y matar es lo que hizo. Todo terminó el 9, dejando casi 200 trabajadores y 25 soldados muertos, 400 trabajadores encerrados en la cárcel y unos 1,500 despedidos.

Cananea y Río Blanco fueron importantes porque los acontecimientos "revelaron el malestar cada vez mayor de la clase obrera que impulsó al Partido Liberal Mexicano (PLM) y a la futura revolución" Por supuesto, estos acontecimientos no pasaron inadvertidos para el gobierno. "Después del tempestuoso verano de 1906, el gobierno Mexicano temió una sublevación general proyectada para el 16 de septiembre, el día de la independencia de México. Tratando de frenar las demandas populares, el gobierno canceló muchas de las celebraciones tradicionales" De hecho, el PLM planeaba una sublevación.

Para este momento, el PLM había podido organizar unos 44 grupos clandestinos de guerrillas por todo México -algunos con 300 hombres, aunque el promedio era de alrededor de 50. Resultaba que los grupos de los Estados Unidos eran más fáciles de armar que en México. Debido a esto, muchas de las unidades del PLM fueron establecidas en la frontera.

El centro principal de esta actividad estaba en la fronteriza ciudad de Arizona de Douglas. Los planes del PLM quedaron al descubierto cuando el gobernador de Sonora, Rafael Izabel, logró infiltrar un agente en el PLM en Douglas. Notificaron a los Rangers de Arizona las actividades del PLM, y entre el 2 y el 5 de septiembre, la mayoría del aparato liberal fue arrestado y sus armas fueron confiscadas antes de que la sublevación real pudiera ocurrir. 060420

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